Por: Karen Medina
El nacimiento de la tipología arquitectónica de los estadios deportivos podría remontarse ciertamente a la antigüedad clásica griega gracias a sus olimpiadas. Grandes eventos en los que los mejores atletas de cada polis competían entre ellos por la gloria y reconocimiento propio, y de su ciudad
La falta de interés deportivo, o de poder realizarlo por parte de una población, que entre esta época clásica (siglo I) y el siglo XX cuando vuelven a reaparecer la tipología arquitectónica del estadio, se había visto subyugada en la mayoría del tiempo por una clase social dominante que no tenía intención alguna de crear espacios públicos para una población dominada y sin apenas poder. Todo esto empieza a cambiar a finales del siglo XIX – principios del XX, cuando los primeros equipos de fútbol y baloncesto comenzaron a organizarse en torno a las grandes capitales y ciudades de cada país, y que necesitaban de unas determinadas infraestructuras para poder albergar a los aficionadas que querían ver a su equipo. (Gómez, 2014)
Desde este momento hasta la actualidad, habiendo pasado poco más de 100 años, el avance y reconversión que han experimentado los estadios, al igual que la mayor parte de las cosas en esta época, ha sido increíble.
Otro de estos ejemplos, quizás no tan espectacular en cuanto al diseño exterior del mismo, pero sí en cuanto a las instalaciones y los avances tecnológicos que alberga a pesar de haber sido construido 5 años atrás solamente, es el AT&T Stadium, también llamado Cowboys Stadium, sede de los Cowboys de Dallas, equipo de la NFL ubicado en Arlington, Texas. Se trata del estadio deportivo más caro del mundo con un precio de 1,1 mil millones de dólares. Con una capacidad para albergar a casi 100 mil espectadores, cuenta con 9 niveles en los que se pueden encontrar todo tipo de servicios, desde cajeros, restaurantes, suites, restaurantes, tiendas, museos de arte contemporáneo. Es como si fuera un pequeño centro comercial, un super complejo deportivo que hace de la estancia en el estadio una maravilla. Como se ha dicho anteriormente, los avances tecnológicos de este estadio son abrumadores, la “Jerry Tron”, también conocida como una de las televisiones de alta definición más grandes del mundo, la cual mide 1070 metros cuadrados de superficie. No les bastaba tener una, sino que tiene dos, cada una enfocada a un lateral del estadio. El techo retráctil más grande del mundo, levantado sobre dos grandes arcos que se elevan a 91 metro del suelo que cruzan el domo completo de la estructura y se anclan al suelo por ambos extremos.
La falta de interés deportivo, o de poder realizarlo por parte de una población, que entre esta época clásica (siglo I) y el siglo XX cuando vuelven a reaparecer la tipología arquitectónica del estadio, se había visto subyugada en la mayoría del tiempo por una clase social dominante que no tenía intención alguna de crear espacios públicos para una población dominada y sin apenas poder. Todo esto empieza a cambiar a finales del siglo XIX – principios del XX, cuando los primeros equipos de fútbol y baloncesto comenzaron a organizarse en torno a las grandes capitales y ciudades de cada país, y que necesitaban de unas determinadas infraestructuras para poder albergar a los aficionadas que querían ver a su equipo. (Gómez, 2014)
Desde este momento hasta la actualidad, habiendo pasado poco más de 100 años, el avance y reconversión que han experimentado los estadios, al igual que la mayor parte de las cosas en esta época, ha sido increíble.
Otro de estos ejemplos, quizás no tan espectacular en cuanto al diseño exterior del mismo, pero sí en cuanto a las instalaciones y los avances tecnológicos que alberga a pesar de haber sido construido 5 años atrás solamente, es el AT&T Stadium, también llamado Cowboys Stadium, sede de los Cowboys de Dallas, equipo de la NFL ubicado en Arlington, Texas. Se trata del estadio deportivo más caro del mundo con un precio de 1,1 mil millones de dólares. Con una capacidad para albergar a casi 100 mil espectadores, cuenta con 9 niveles en los que se pueden encontrar todo tipo de servicios, desde cajeros, restaurantes, suites, restaurantes, tiendas, museos de arte contemporáneo. Es como si fuera un pequeño centro comercial, un super complejo deportivo que hace de la estancia en el estadio una maravilla. Como se ha dicho anteriormente, los avances tecnológicos de este estadio son abrumadores, la “Jerry Tron”, también conocida como una de las televisiones de alta definición más grandes del mundo, la cual mide 1070 metros cuadrados de superficie. No les bastaba tener una, sino que tiene dos, cada una enfocada a un lateral del estadio. El techo retráctil más grande del mundo, levantado sobre dos grandes arcos que se elevan a 91 metro del suelo que cruzan el domo completo de la estructura y se anclan al suelo por ambos extremos.
Figura 1. Cowboys Stadium (Gómez, 2014)
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